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viernes, 28 de febrero de 2014

La MASONERIA y las modificaciones del artículo primero de las Constituciones de Anderson entre 1738 y 1813

 "... Se ha pensado transmitir tal cual lo que que nos llega de los principios del Rito; lo que no comprendemos o no sabemos interpretar correctamente, las siguientes generaciones podrán quizás aclararlo; y para poder hacerlo, necesitan por lo menos recibirlo como fue establecido al principio". (Extracto del prologo del Ritual de Maestro Masón que Gran Logia de España publicara para el Rito de Emulación). 


Sobre las Constituciones de Anderson, como ocurriera con los Ritos y Rituales en las diferentes Potencias Masonicas, es complicado conocer el espíritu inicial de los textos que, como fariseos, tanto decimos cuidar y respetar.
En unos casos modificaciones, incorporaciones o matizaciones, llenas de los mejores propósitos, han llegado a corromper sin el menor pudor el espíritu de los textos que hoy recibimos y aceptamos como "autenticas fuentes de la tradición masonica" .


¿Qué tradición?. ¿Qué Regla?. ¿Qué regularidad?


LAS MODIFICACIONES DE LAS CONSTITUCIONES DE ANDERSON  1738 Y 1813




El artículo primero de las Constituciones de Anderson (1723) decía:

" Un Masón está obligado por su título a obedecer la Ley moral y si comprende bien el Arte, no será jamás un ateo estúpido, ni un libertino irreligioso. Sin embargo, en los tiempos antiguos los Masones fueron inducidos en cada país a pertenecer a la religión de ese País o de aquella Nación, cualquiera fuese, no obstante, se le considera ahora como aceptable de someterlo a la Religión que todos los hombres aceptan, dejando a cada uno su particular opinión, y que consiste en ser hombres buenos y leales u hombres de honor y de probidad, cualesquiera fuesen las denominaciones o creencias que pudiesen distinguirlos; de este modo, la Masonería deviene el centro de unión y el medio de anudar una verdadera amistad entre personas que hubiesen debido permanecer perpetuamente alejadas entre sí".


El texto se modificó con motivo de la transformación de la Gran Logia de Londres en Gran Logia de Inglaterra, quedando en  1738 así ):

"Un masón está obligado por su título obedecer a la ley moral en tanto que verdadero noaquita y si comprende bien la profesión, él no será nunca un ateo estúpido, ni un libertino irreligioso ni actuará en contra de su conciencia. En los tiempos antiguos, los masones cristianos eran llamados a actuar de acuerdo con las costumbres cristianas de cada país donde ellos viajaban. Pero la masonería existente en todas las naciones, aun de religiones diversas, lleva a que los masones adhieran a la religión según la cual todos los hombres están de acuerdo (dejando a cada hermano sus propias opiniones), es decir, ser hombres de bien y leales, hombres de honor y de probidad, cualquiera sean los nombres, religiones o confesiones que ayuden a distinguirlos: pues todos se articulan sobre los tres artículos de Noé suficientes para preservar el fundamento de la Logia. De este modo la Masonería es el centro de la unión y el feliz medio de unir a las personas, quienes, de otro modo, habrían permanecido perpetuamente desconocidas entre sí"


El nacimiento de la masoneria es, como hoy, fruto de división tras división: En un principio estas fueron  entre las "Antiguas" y las "Modernas", finalmente las dos corrientes se reunifican formando la actual Gran Logia Unida de Inglaterra que incluye el siguiente texto en sus nuevas constituciones ajustando y cambiando a su antojo aquello que habían recibido. Quedando el texto de 1813 como sigue :

"En lo que respecta a Dios y la Religión: un masón está obligado, por su título, a obedecer la ley moral y si comprende bien el Arte, él no será jamás un ateo estúpido ni un libertino irreligioso. De todos los hombres, él debe comprender mejor que Dios ve de otra manera que el hombre, pues el hombre ve la apariencia externa, en tanto que Dios ve el corazón. Un masón está, en consecuencia, restringido a no actuar nunca en contra de los mandatos de su conciencia.

Cualquiera sea la religión del hombre o su manera de adorar, no está excluido del Orden, considerando que él cree en el glorioso arquitecto del cielo y de la tierra y que él practica los deberes sagrados de la moral. Los masones se unen a los hombres virtuosos de todas las creencias en el lazo sólido y agradable del amor fraternal, que les enseña a ver los errores de la humanidad con compasión y a esforzarse por la pureza de su propia conducta, de demostrar la alta superioridad de la fe particular que ellos profesen".


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